miércoles, 14 de septiembre de 2011

I think it's kinda fun when I hit you in the back of the head with a gun.

Empezaba a gustarle demasiado la sangre.
A gustarle mezclar cosas.
Y la cosa empezó a ponerse fea, cuando empezó a mezclar el alcohol con las balas.
Porque disparar engancha, y el sexo más.
Se obsesionó con la mantis religiosa.

Pero se olvidó de rezar...

Ilse

4 comentarios:

  1. Continúa, Continúa.
    Quiero saber más.

    (Amo a Ilse y a Bru. Tienen algo de heroínas de Blogspot)

    P.

    ResponderEliminar
  2. Hmmm... todo eso está sobrevalorado, caos, tampoco es algo tan inusual, debería cntarselo a Ilse si me fuera a escuchar.

    ResponderEliminar
  3. El exceso es la perdición de la humanidad. Lo dijeron los griegos hace demasiados años ,pero continúa siendo una verdad inconmensurable.

    Me gustan las mantis, aunque siempre he preferido a la Viuda Negra.

    Besos de neón, te sigo.

    ResponderEliminar
  4. Por separado ya son malos así que juntos pueden ser algo demasiado mortal.

    ResponderEliminar

Si dejas comentarios, que sean sobre la entrada, blog, o alguna pregunta que tengas para mi. Por favor, no hagas spam, no visitaré tu blog si lo haces...
gracias :)