Halloween

Andaba ansioso por encontrarse con las sombras,  paso rápido, no quedaba tiempo. La luna estaba a punto de ponerse en su punto más alto. Levantó la vista. Demasiado tarde, estaba sobre él. Notaba como le quemaba la piel, como se le encogía el corazón de miedo, se le cortaba la respiración ante el pánico de lo que podía llegar a hacer si encontraba a alguien. Un aullido fue arrastrado por las aguas del Sena.  Sus  ojos permanecieron en blanco por segundos. Luego tornaron totalmente negros, de ese que atrapa, que paraliza, del que no puedes escapar. Su esqueleto cambió por completo, sus músculos se fortalecieron, y le salió pelo por todo el cuerpo. Y sus dientes, se volvieron enormes, puntigudos, desgarradores.

-¡Bonito disfraz, perrito!- Gritó un borracho.

Y esas sin duda fueron sus últimes palabras, sin contar, claro està sus gritos de agonía.

Este texto lo he mandado también a un concurso: http://micamisadelasuerte.blogspot.com/2011/10/efimero.html?showComment=1320078833468#c1612856730032484603

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-Limón

I must admit...

Y yo que ya había visto muchas cosas en mi vida, sabía cómo iba a acabar la cosa. A la gente le gusta hacer las cosas sencillas. Pero he aquí el problema. ¿Qué hacer cuando la cosa es ya sencilla? Una pregunta bastante tonta, ¿no? pues os puedo asegurar que todos y cada uno de vosotros, de ellos, tenéis esa extraña manía de complicar las cosas cuando ya son sencillas.

-¿Quién es?
-¿Quién?
-No lo sé, por eso lo pregunto.
-¡Pues, vete, y deja ya de molestar, Lily!
-¿Es tu novia?
-¡¿Qué dices?! No tengo novia, así que déjame en paz.
-¿Pero te gusta?
-Que lo dejes.

Ya lo entenderéis...
-Dan

And I know why; cause I'm high.

-Et voilá la foire du Boston!-Dijo Liam a Mike.
-C'est pas mal-Contestó él.
-Compraremos algodón de azúcar, ¿Verdad? No he venido hasta aquí arriesgando el pellejo para encima que no me compres uno.
-Sus deseos son ordenes. Y ahora, nos espera la diversión detrás de la noria.
-¿Qué tipo de diversión?-Preguntó Mike.
-Algo bueno, opio.
-¿Has traído la pipa de la paz?-Preguntaste.
-¿Pipa de la paz?
-Si, bueno, le llamamos así, es donde ponemos le hierba, luego la vamos pasando.
-¿De dónde has sacado al lerdo este? ¿Que pasa, todavía te viste tu mami, Mike?-Preguntaste pellizcándole una mejilla.
-No creo que lo más conveniente es que encima que te escapas, llegues colocada.-Dijo Liam.-Quédate a dormir en el Hoyo.
-Tienes razón, fumada seré más facilona,¿no? Buen intento, pero tu ya sabes que no me gusta comer cosas pochas...


-Aria

I hope you understeand II

Miras a cada uno extrañada, en sus caras, una expresión de estupor y miedo.

-¿No me has oído?

-Si, claro.

-¿Entonces?

-Bah, no es para tanto, ya sabes, somos solo novios, tranquila, no le pegaré la peste.-Interviene él.

-¡Ryan!-Dices tu enfadada.

-¿Es cierto?-Pregunta ella.-Por el amor de dios Otte. ¿No hay más tíos en el mundo? ¿Precisamente este? ¿Y tu Ryan? Bueno, Nate para los amigos, ¿no? Vamos anda,- Dice mientras te coge del brazo-tienes razón, mejor hablemos en el avión, que por lo visto tienes muchas cosas que contarme...

-No os vais hasta que pueda hablar con ella a solas.

-No voy a permitir que le hagas daño.-Contesta Bru con los ojos llorosos.- ¿No tuviste suficiente con alejar a su hermana de ella?

And when the world gets in my face...

-Aria!
Abres los ojos medio dormida.
-Aria!
Vuelves a oír otra vez. Miras el despertador, son las dos de la madrugada.
Te asomas a la ventana y ves a Liam debajo de la farola, en la calle, con otro tipo.
-Claro que estas son horas de chillar mi nombre...-Dices mosqueada.
-Perdón, pero no quería volver a cargarme la ventana pedradas.
-Y es mejor despertar al personal antes que probar a lanzar con menos fuerza.
-Mañana hay feria.
-Mañana sigo retenida en contra de mi voluntad.
-Vamos, Aria, como si fuese la primera vez que te escapas.
Miras hacia dentro. Enciendes un cigarrillo y le das una calada.
-¿Y ese?-Preguntas mientras haces un gesto con la cabeza señalando al que le acompaña.
-Mi primo Mike. ¿Vendrás?

No me gustó tu respuesta.
-Aria

Por quién doblan las camapanas.

Estaba tumbado boca abajo, sobre una capa de agujas de pino de color
castaño, con la barbilla apoyada en los brazos cruzados, mientras el
viento, en lo alto, zumbaba entre las copas. El flanco de la montaña
hacía un suave declive por aquella parte; pero, más abajo, se convertía
en una pendiente escarpada, de modo que desde donde se hallaba tumbado
podía ver la cinta oscura, bien embreada, de la carretera, zigzagueando
en torno al puerto. Había un torrente que corría junto a la carretera y,
más abajo, a orillas del torrente, se veía un aserradero y la blanca
cabellera de la cascada que se derramaba de la represa, cabrilleando a la
luz del sol.

Hemingway, siempre, esos días en los que nada te sirve, en los que todo es lo mismo otra vez.
Tu inspiración, tu ídolo.
Saber que nunca tendrás el placer de conocerle.
Pero disfrutas de su obra, sus palabras maravillosas.
Esas que te hacen crecer como persona, como escritora, esas que te ayudan a avanzar, esas que te consuelan.

I hope you understeand...

11:15
                             11:30
          11:45
                                            12:00
La ves llegar, está más flaca, más morena, y con el pelo mucho más largo que la última vez.
Te ve y pone cara de preocupada.
-Vamos Bru, vayámonos de aquí, te lo explicaré por el camino.-Dices mientras le coges del brazo.
-Otte, ya te dije que no nos iríamos hasta que no me digas si lo hiciste.
Un nudo se te hace en la garganta, es ella, es tu hermana, la única persona a la que no quieres decepcionar, la única cuya opinión es la que más te importa.
-No lo sé, iba borracha...
Ves a Ryan venir hacia ti tras de Bru.
-Joder Charlotte, te he estado buscando. ¿Qué haces aquí? ¿Bru?
Bru se gira boquiabierta y le mira asustada.
-¿De qué conoces a este hijo de puta?-Te pregunta enfadada.

'Cause I'm overly attracted, and terribly convinced...

Como una aparición celestial, bajando por las escaleras, una muchacha rubia, de grandes ojos verdes, y pecas en la nariz, te deslumbró con una sonrisa que hizo que pusieras esa cara tuya de cuando estás, asombrado,  embelesado, absorto, fascinado, como hechizado...
-Esta es la estúpida de mi hermana, Penny.
-No es cierto, no soy su hermana, mis padres le encontraron al lado de un cubo de la basura, en el Soho, les dio pena y lo trajeron a casa, es demasiado poca cosa para ser mi hermano...- Contestó ella mientras se largaba empujando con el hombro a Matt.
-Amor fraternal, simplemente maravilloso...-Dijo sarcástico Andrew.
-Calla Toulson, no sabes lo BRUJA -dijo medio chillando- QUE ES ESA INÚTIL.
-¿Yo? ¿Oírte? ¿Que va? -Contestó desde la otra punta, a grito pelado también ella.
-Niñata... Bueno ¿Empezamos?


Quizás no era tan mala idea eso de la banda...


-Dan

You write such pretty words, but life's no story book

-¿Te crees muy lista por encontrarme?

-Por eso y por lo que te voy a hacer- Responde ella acercándose a ti.-Vamos Claire ¡Antes eramos amigas!

-Han pasado muchas cosas desde entonces.

-Pues olvidemoslo, volvamos a ser las de antes. Sé que no has olvidado esas noches de complots.

-Eso ya pasó.

-¿Me has cambiado por esa Débora. Porque yo la encuentro bastante estúpida...

-Es mi amiga.

-Ya, claro. Tu sabes que esto te aburre, volverás a ser la misma de antes y nos lo volveremos a pasar bien juntas.

Y es que aunque la mona se vista de seda, mona se queda...

-Claire

J'ai une lettre pour toi.

Bru, ya sé que hace tiempo que no tenemos mucho contacto, pero supongo que si has visto las noticias sabrás por qué te escribo esto.
Necesito verte, e irme contigo a Paris, no puedo dejar que lo descubran, es demasiado peligroso para la familia.
Espero que recuerdes que fui la única que te apoyó hace años cuando te fuiste, y que me dijiste que siempre que lo necesitase podría quedarme en tu casa.
No sé si tendrás suficiente espacio para mi, tampoco pido quedarme ahí, pero necesito que me ayudes a encontrar algún sitio para quedarme unos meses hasta que las cosas se calmen por aquí.
Ven a Londres este fin de semana y volvemos juntas a Paris, te esperaré el sábado en la puerta del metro de Greenwich.
Por favor, no me falles.

I ain't gonna do what I don't want to.

-¿Aria Thomas?- Preguntó el director.
-Soy yo- respondiste sin ganas
-Aria, es la quinta vez este semestre que tenemos la misma conversación.
-No es cierto, la última vez dijo que era la cuarta- Respondiste con una sonrisa estampada en la cara.
-Aria, eres buena estudiante, no te conviene replicar a los profesores.- Prosiguió él sin hacer caso a tu comentario.
-Ella se metió conmigo.- Dijiste cruzando los brazos- dijo que el movimiento hippie era una auténtica sandez y que las mujeres como yo seguramente moriríamos de alguna enfermedad venérea.
-Lo sé, ya he hablado con tu profesora, pero de todos modos no puedes contestarle...- Leyó una nota- "Se nota que está mal follada, por eso dice eso la muy zorra". Es la quinta, ya sabes que significa, expulsada durante una semana.
Te levantaste de la silla pero no sin decir antes de irte:
-Ah claro, que es usted su marido. Normal que prefiera irse de putas antes que tocar a ese bicho...


Fue bastante divertida su cara de incredulidad.
-Aria

Yes I get by a little help form my friends.

-¿Qué lees Embrey?- Preguntó un muchacho rubio que se bajó de una bicicleta ante ti.- ¿Dickens otra vez?
-Hola Andrew.- Saludabas mientras alzabas la mirada hacia él, y entrecerrabas los ojos por la ceguera del sol.- ¿Hace falta que lo preguntes?
-Hahah. ¿Cómo está mi Ringo Starr favorito?
-Dime que no estás otra vez con lo de la banda.
-Venga Dan, será divertido. Los lunes, martes y jueves en el garaje de Matt, solo nos faltas tu.

Me miraste como si en mis ojos tuvieses que hallar la respuesta.
-Dan

Show me all the things that I shouldn't know

-Bru
-¿Que?
-¿Que hacías antes?
-¿Antes de qué?
-Pues de que viniese a vivir aquí
Levantas la vista por encima del periódico y la miras con esa mirada tuya de cuando estás harta de algo.
-Ni es de tu incumbencia, ni te lo voy a decir por mucho que insistas.
-¡Pero tu ya sabes lo mío!
-No esperarás que después del tiroteo que hubo en mi salón te dejase quedarte así como así.
-...-Ilse no contesta, pero te mira con cara de extrañada- Tu nunca lees el periódico.
-Pues hoy si.
-¿Y que dice?
-Nada.
-Ay mira, no sé que te pasa hoy pero estás más insoportable de lo normal.
Se levanta de la mesa ante tu cara de estupefacción. 

No se ha dado cuenta de que tus labios están ensangrentados, de tus ojeras, ni del titular del periódico...

Vuelve a abrirse la investigación sobre la desaparición del joven inglés Paul Crompton.

 -Brunette.

Hey teacher, leave the kids alone!

Siguiendo las normas de la sociedad, Aria fumaba porros, escuchaba Pink Floyd, corría delante de la policía en las manifestaciones, y se escapaba de casa por las noches para ver a su novio.
Aquellos setenta nunca los olvidaría.
Vivió al máximo su adolescencia. Claro que le trajo algunos -bastantesmuchos- dolores de cabeza, pero ya sabía que iba a pasar.

Puede que eso influyese bastante...
-Aria

Is not easy facing up when your whole world is black.

Esa sensación de que el pecho va a explotarte, de que solo tienes ganas de estar junto a esa persona, que una sonrisa tonta aparece en los labios cuando piensas en él. Esa sensación nunca la tuvo.
¿Por qué?
Algunos dicen que su corazón nunca llegó a latir. Otros que le hicieron daño y que ahora se venga.
Realmente nadie lo sabe. Y creo que es mejor que nadie lo sepa, si no quiere sumir su mundo entero en un lago de dolor y desesperación.
No notará que su pecho va a explotarle, sino por el contrario que va a absorber todo su ser cual agujero negro.
Que no volverá a ver otro amanecer.

When I was younger so much younger than today...

En un mundo donde sonaban los Beatles, Psicosis acababa de atemorizar al mundo entero y los videojuegos de escuetos gráficos dejaban estupefacto a cualquiera, ¿Qué podía esperarse de un chaval de Notting Hill?
Melena a lo Beatles, rock n' rolleaba con sus amigos e intentaba meterle mano a toda a la que podía.
Comía chicle a todas horas, peleaba con su hermana, y se quejaba de su gata Limón.
Nadie supo nunca que cuando estaba a solas conmigo me acariciaba y me contaba sus cosas. Nunca entendí su comportamiento. Supongo que era la rebeldía de un adolescente de aquella época lo que le impulsaba a ello, o quizás solo quería molestar a Lily.
Dan, llevaba una vida normal, una vida de la que no podía quejarse. Era un buen niño, buen alumno.


Aunque todo cambió al acabar el curso, con sus quince años recién estrenados.


-Daniel.

Meow.

Y en una ciudad tan preciosa como Londres, con esos parques, esos edificios, el Big Ben. Oh el Big Ben, cada vez que paso por delante me siento pequeña, minúscula... Y cómo suenan sus campanas, imponedoras, gloriosas, parece que nos avisen del armagedon.
Me encanta ver cómo sale el sol desde cualquier tejado. Cómo la nieve que cae se funde al entrar en contacto con el agua del Thames.
Asustar a las ardillas de Hyde Park, y las ocas que merodean entre paseantes y turistas.
Y los sábados por la mañana en Portobello Ryan O'reilly Band tocando sus letras melancólicas que tantos paran a escuchar.
Me encanta sentarme en las escaleras de Trafalgar Square y mirar cómo se esconde entre los edificios el Big Ben bañado por la luz de la luna.
Nadie debe marcharse de Londres sin haber visitado el mercado de Camden. Con esas tiendas misteriosas, ese olor a comida de todos los países.


Lo que iba diciendo; que de toda la gente con la que me he cruzado, apuesto mis bigotes a que ninguna de ellas habrá pensado jamás la edad de esa gata callejera. Ninguna habrá adivinado mis más de ochocientos años de vida. Ni la de historias que he presenciado.
Algunos de vosotros conocéis las que os voy contando a medida que me entero.
Pero conozco otras que nadie más sabe. Otras que pasaron hace tanto que no las recuerda ni el viento.

¿Queréis conocerlas?


-Limón.

Gotta leave you all behind and face the truth.

-¿No tienes miedo?

-¿De qué? ¿De lo que ocurra ahí dentro? ¿De lo que piensen los demás?

-Si

-Estoy aterrada...

Él te estrecha entre sus brazos mientras sollozas silenciosamente.

-Pero debo hacerlo...-continuas- Cuanto más lo alargue peor será el final.

-Y yo estaré ahí para apoyarte.

Parece increíble lo lo largo que se puede llegar a hacer el camino hacia la sala de interrogaciones.

-Charlotte.

Come on and give up off your knees.

Levanta, siente como la sangre resbala por tu piel mezclándose con el sudor.
No te dejes intimidar. Muéstrale tu furia al mundo.
Chilla, pero nunca te rindas.
Ofende a tu enemigo llegando más alto que él. 
Da otro golpe de estado contra tus emociones.
Enseña al viento a volar.
No seas esclava de la sociedad.
Ruge al universo.
Escala la montaña de tus miedos, no te arrastres ante nada ni nadie.


Es mejor morir de pie que vivir de rodillas.


-Claire.

I never once thought, I'd ever be caught.

Su débil pulsación se confundía con el tictac de las manecillas de su reloj de pulsera.
Una nube de confusión volaba, y giraba lentamente sobre su cabeza.
Sus últimos segundos en la tierra...

Te ofrecimos esto, este es el precio. Si lo quieres bien, y si no, allá tu.
Maldita codicia.
Malditos bastardos.

El sol no brillaba con fuerza, puesto que eran las siete de la tarde, un 5 de octubre de 1984.
El frío aire de Munich calaba cada uno de los huesos de su moribunda figura.
Había compuesto su propio réquiem. 
Ahora venía el solo de contrabajo.

I jus wanna walk right out of this world...

Tenía una mirada dulce y un gato. 
Hacía pasteles y se le olvidaba enfadarse. Era feliz, sin motivos, simplemente, lo era.
Quizás fue eso lo que la empujó a marcharse. Le gustaban los retos, y aquí la vida era demasiado monótona para ella. 
Nunca dijo a donde iba, puede que no lo supiera ni ella.
Nadie la había vuelto a ver.
Hasta ayer, en París.
Todo el mundo la vio saltando desde un edificio.
Cayendo, precipitándose contra el suelo.

Maldita sociedad...