domingo, 27 de julio de 2014

I want you to dare

A veces te preguntas qué es el amor. 
A veces sabes la respuesta, pero esta vez es diferente. Esta vez es miedo.
Es miedo cuando estás lejos, cuando no estás con él. Es miedo cuando piensas en el daño que te han hecho y en el daño que te puede hacer.
Y en el que le puedes hacer.
Porque sabes que estás atada de pies y manos. No puedes escapar del sentimiento de ahogo cuando piensas en él.

A veces el amor es miedo.
Un miedo cuya causa es el remedio.

miércoles, 16 de julio de 2014

I don't need to be saved.

La pared te parece cada vez un objetivo más atractivo.
Calma, cálmate, respira hondo. 
Te das cuenta de que te estás clavando las uñas en la palma de la mano, aunque eso no te impide seguir apretando el puño.
Calma, cálmate, respira hondo. 
Cada vez te cuesta menos aguantarle una mirada desafiante. Quién se ha creído que es para tratarte como una mierda cuando le da la gana.
Calma, cálmate, respira hondo. 
Destensas el brazo. 
Calma, cálmate, respira hondo. No llores.
"Vamos a tener que llevarte a un psicólogo, esta agresividad hacia tu madre no es normal" Una y otra vez. Una y otra vez. No se va de la cabeza.
Calma, cálmate, respira hondo. No llores.
Y empiezas a notar como sube la temperatura de la habitación. La rabia, la tensión, el saber que no puedes hacer nada para huir, escapa por tus ojos.
Calma, cálmate, respira hondo. No llores.

No merece tener el poder de herirte.

martes, 15 de julio de 2014

All I wanted was just some peace of mind

Bien, ratillas. Limón se ha desperezado y ha vuelto a coger su vieja máquina de teclear. 
Os debo una explicación de esta repentina vuelta al mundo de las letras anónimas, y os la pienso dar.
He estado los dos últimos años viviendo, acumulando experiencias, aprendiendo a base de porrazos y más porrazos. Ésta noche he llegado a un punto de inflexión en el que me he dado cuenta de que hace tiempo que siento un vacío. He seguido escribiendo en libretas de papel, pero nunca cosas como las que escribía por aquí. Ésto era especial, y me acobardé. Me acobardé y dejé de lado algo que me ayudaba mucho y que me encantaba.
En un momento de nostalgia he entrado en el blog y ha sido entonces cuando he admitido que dejar de publicar aquí fue un gran error, así que mis historias van a volver con otras formas y otros nombres.


Os advertí que no sería tan fácil librarse de mi.