domingo, 5 de febrero de 2012

Drenched in my pain again. Becoming who we are

Para este fragmento poned esta de fondo ;)

Abres de golpe la puerta. Llorando, te pones a correr por los pasillos. Apartando enfermos, médicos, gente en general. Te para una enfermera.
-¡Que no quiero un puto calmante!-chillas- ¡Quiero ver a mi hermana!
Te entran nauseas de los nervios. Te sacudes para que la enfermera te suelte del brazo y sigues corriendo.
Llegas a la habitación. La ves en una cama, tapada con una sabana blanca. Una mascarilla de oxígeno y tubos que salen y entran de su cuerpo.
Te caes al suelo de rodillas y rompes a llorar.
Notas una mano que se apoya en tu hombro.
-Está en coma...-murmura Ryan. Se agacha y te abraza.

Pero nada es suficiente. Cuando la única persona a quien necesitas realmente está en la línea. Esa línea que nos separa de aquellos a los que nunca más volveremos a ver. Tan frágil, borrosa y fácil de traspasar. 
Y mientras un corazón late fuerte, rabioso. Otro se duerme, desfallece, y a duras penas puede mantener los ojos abiertos.

-Charlotte.

4 comentarios:

  1. Joder, entre la entrada y la canción has conseguido hacerme llorar.

    Nada es suficiente. Y todo lo que queda es: "Impotencia".


    J.

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  2. Creo que te hace dar cuenta de lo que verdaderamente tienes, y no hay que desaprovecharlo (:
    Me gusta mucho como escribes, siempre entro a tu blog. Me encanta. En fin un beso enorme (:

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  3. Esta canción por si sola ya es... pero sumándole el texto, uf. un beso

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