Somehow I found a way to get lost in you

Tu -ya- larga melena anaranjada cae sobre tus hombros.
Un cuarteto de jazz formado por un contrabajo, un saxo y un batería acompañan tu soledad con un melancólico blues en una esquina en la gran sala del club.
Unos tipos juegan al póker en dos mesas más atrás, mientras tu remueves la oliva de tu casi vacía copa de martini sentada en la barra.
Entra un tipo haciendo chirriar la mal engrasada puerta la cual provoca un pequeño estruendo al cerrarse de golpe.
El hombre observa el panorama y decide acercarse a ti y sentarse a tu lado.
-Uno como el de la señorita, y para ella también.-Le dice al camarero.
-¿Puedo preguntar de parte de quién soy invitada?-Dices amarga mientras lo escrutas con la mirada; lleva el pelo corto y castaño, un traje caro y nuevo, todavía lleva la etiqueta con el precio, bastante despistado por lo que parece, y ningún anillo en la mano.
-Jérémie Rousseau. ¿Y la señorita es...?
-Chloé.
-¿Mal de amores?
-¿Amor? ¡Ja! Eso solo son paparruchas, el amor no existe, son todo patrañas, lo dejas todo por esa persona, y cuando ya no está, te quedas sola y con una mano detrás y una delante. No creo en el amor, y dudo mucho que vaya a hacerlo...


-Ilse